Queda ya lejano el 2009, cuando nuestra querida Inés, consiguió por medio de subvención del Gobierno de Navarra, 20 tablets PC para el colegio de Andéraz.

Todavía recordamos el temor a los «daños» y «malos usos» de estas, su delicadez ante los «genios» de cualquiera de nuestros chicos y chicas en algún mal momento… y ahí siguen, a tope, y funcionando.

Esta claro que las baterías no son lo que eran, y que pese al mantenimiento, la velocidad ha perdido un poco de fuerza, pero ya hubiéramos firmado entonces que hoy, a 2019, nuestras preciadas tablets siguieran operativas.

Parece que fue ayer cuando fuimos por primera vez a las instalaciones de Ardantze, pero desde entonces han pasado ya 10 años, de los cuales, 9 hemos desarrollado clases de natación.

Inti, Lorena, Txema y Ander han sido un grupo de profesores estupendos, que han dado el 100% por cada uno de nuestros alumnos y alumnas y que les han ayudado a superarse en todo momento. No podemos olvidar tampoco al resto del equipo de profesionales de la instalación que siempre ha sido magnífico para con nosotros, destacando al anterior gerente, Ander Martínez, sin cuya colaboración hubiera sido imposible llevar a cabo esta actividad.

Por eso, no nos queda más que agradecer a las instalaciones de Ardantze estos años tan maravillosos, con la pena de no poder volver a visitaros bajo el nombre de Andéraz.

GRACIAS

Los hermanos Curero, Asier y Juan, estuvieron en el centro a principios de esta década. Asier trabajo con nosotros durante 2 cursos, mientras que Juan estuvo desde 4º.

Residentes en la majestuosa Laguardia, nuestros chicos vinieron de visita al colegio, rememorando sus andanzas y «fechorías» por estos lares.

Unos chicos maravillosos de los que guardamos tan buen recuerdo como ellos de nosotros.

El 1 de mayo, nuestros chicos y chicas de Andéraz, no hicieron fiesta.

Aunque sea un día festivo a nivel nacional, nuestro internado siguió abierto, y posibilito una jornada de plena naturaleza aprovechando los espectaculares parajes de los alrededores del centro escolar.

Con salida desde Andéraz, nuestros estudiantes se dirigieron al majestuoso Monasterio de Irantzu, desde donde empezaron a subir por los bonitos senderos de la zona.

Con paradas puntuales, para descansar y recuperar fuerzas, o simplemente para ver el paisaje, los chicos y chicas de Andéraz llegaron a hacer cima en el imponente Dulantz, lo que les permitió disfrutar de unas vistas sin igual.